Muchas de las fotos que hacemos los fotógrafos pierden el interés con el tiempo. Son fotos que son buenas sólo por unas horas o días , periodísticamente hablando, porque recogen un momento especial o trascendente, pero con el paso de los días se vuelven fotos vulgares, dado que su interés era únicamente puntual. Por el contrario hay otras imágenes que con el tiempo maduran y un día, a pesar del paso del tiempo, se vuelven de rabiosa actualidad y vuelven a tener mucho interés. Quizás aquel día pasó desapercibida. Es por ello que hay que ser cuidadoso con nuestras fotos y con nuestro archivo y pensar que algún día una imagen valdrá la pena recuperarla.
Un ejemplo de esto que explico es la foto que os presento hoy. Una imagen del año 2007. Durante la temporada 2006-2007. Partido de la segunda vuelta de la liga que enfrentaba al FC Barcelona contra el Real Madrid. Era la tercera temporada de Messi en el Barça pero era su primer enfrentamiento con el enterno rival en el Camp Nou. Messi estuvo a la altura y le endoso un Hat trick a Casillas que sirvió para empatar a tres. Al final del partido Raúl, la gran estrella blanca, ya consagrada, observaba el partido desde el banquillo dado que había sido substituido en los últimos minutos por Capello. Tras el pitido final Raúl no dudó en salir del banquillo, antes de dirigirse al vestuario y felicitar a Messi por aquello que había hecho. Quizás el delantero blanco, que ya lo había ganado todo con el Madrid ya sabía que estaba felicitando al que algún día lo superaría como máximo goleador en todas las competiciones y que ese bajito, iba a ser el mejor jugador del mundo.
Un ejemplo de esto que explico es la foto que os presento hoy. Una imagen del año 2007. Durante la temporada 2006-2007. Partido de la segunda vuelta de la liga que enfrentaba al FC Barcelona contra el Real Madrid. Era la tercera temporada de Messi en el Barça pero era su primer enfrentamiento con el enterno rival en el Camp Nou. Messi estuvo a la altura y le endoso un Hat trick a Casillas que sirvió para empatar a tres. Al final del partido Raúl, la gran estrella blanca, ya consagrada, observaba el partido desde el banquillo dado que había sido substituido en los últimos minutos por Capello. Tras el pitido final Raúl no dudó en salir del banquillo, antes de dirigirse al vestuario y felicitar a Messi por aquello que había hecho. Quizás el delantero blanco, que ya lo había ganado todo con el Madrid ya sabía que estaba felicitando al que algún día lo superaría como máximo goleador en todas las competiciones y que ese bajito, iba a ser el mejor jugador del mundo.
Comentarios
camaras de foto
y de esta manera poder crear arte con este artefacto. Ojala que pueda seguir haciendòlo por mucho tiempo mas